domingo, 6 de julio de 2014

Pienso escribirlo en tu espalda

Te imagino al despertar
Volcándote sobre tu cuaderno
Desnudo
Haciendo palabras los sueños
Que esa noche tuviste
Y ver cómo una y otra vez
Se repiten las páginas
En los que nombras
A mis labios,
A mi espalda bañada de tu sudor,
A tus brazos arqueados sobre mí
Sobrepasando la frontera de mi pecho
Hacia el sur de mis caderas.

Me pone tanto la idea
Que he salido de la ducha
Empapada en imágenes
Para pedirte que esta noche
Sueñes de nuevo conmigo
Pero sin embargo,
Te quedes desnudo en la cama
Para contarlo...


Descuida,
yo escribo,
Susurrame,
Comencemos...

Piñata para una vida

Sumerges tu mano
Bajo mi falda
Con la cara de un niño
Dispuesto a robar
Su primera golosina.

Y a pesar de saber
Que no soy el primer dulce
Que te llevas a la boca
Traigo conmigo los nervios
Del primer escondite de la infancia.

Debo confesar
Que no hay mayor regalo en la vida
Que ver en tus ojos claros
Las ganas de apagar todas las luces,
De cerrar las fronteras que nos separan del mundo,
Y llenar de calor los metros que nos rodean.

A fin de cuentas,
Y hablando claro,
Debo confesar que
Nada me pone más que tu risa
En mitad de un beso
Que al mirarte,
Ato las horas con orgasmos incansables,
Que el día que decidas huir,
Al niño de las golosinas
Pienso regalarle
Una piñata
En la que quepamos
Tú, yo, y el mar.