lunes, 29 de junio de 2009

Lo olvidé.


He sentido el frío, el miedo, el vértigo.
Creí tener el mundo entre mis dedos,
Ser el dueño de mi vida,
Y, qué coño, de la tuya.

Olvidé el hormigueo que se siente
Cuando te dedican un te quiero,
Y nunca jamás te lo repetí.
De verás, hoy lo siento.

Olvidé también,
Atarme fuertemente los cordones,
Confiado, me caí,
Y allí estabas para levantarme.

Lloré como un niño,
Mordí diente contra diente,
Aparté tu mano,
Y con orgullo y soledad, me levanté.

Alcé la vista,
Ya no estás,
Perdí el equilibrio de mi vida,
Y estuve tirado hasta el día de hoy.

Al fin has cogido el teléfono,
Respondido a mis llamadas,
Anula tus citas,
Desconecta el móvil,
Pide vacaciones,
Aún te debo muchos besos,
Demasiados te quiero.